Gualeguay entra al negocio de la basura
Días atrás se firmó un “convenio de colaboración” con una empresa privada por el cual se acordó un negocio donde la comuna le entregará sus plásticos recolectados a cambio de productos terminados, evadiendo lo que establece la ley.
Según Prensa Municipal, fue el propio intendente municipal, Federico Bogdan, quien, en la cafetería del Howard Johnson, firmó este “convenio de colaboración” con una “importante empresa de Paraná” para “el tratamiento de residuos plásticos”, gracias a gestiones realizadas por la Secretaría de Gobierno y Asuntos Sociales.
De acuerdo a la información difundida, se trata de la empresa Quanta, de Paraná, Entre Ríos, ubicada en el Parque Industrial General Manuel Belgrano, la cual se dedica a la fabricación de productos en base a plásticos reciclados.
Según se puede apreciar en su sitio web, esta empresa mantiene una larga lista de negocios con municipalidades, en los cuales, disimulados como convenios de colaboración, ésta recibe materia prima que paga con productos terminados.
En este caso, esta empresa se habría comprometido a, “por cada plástico entregado por el Municipio local, entregar, a elección de la Comuna, los elementos de mobiliario urbano construidos prioritariamente con plásticos reciclados”.
Cabe destacar que Quanta se presenta a través de las redes sociales como una organización no gubernamental (ONG) de Reciclaje y Tratamiento de Residuos comprometida con el medio ambiente, pero, en realidad, es una empresa industrial privada dedicada al negocio del reciclado de plásticos, al igual que una radicada en nuestra ciudad, la cual nunca fue consultada por el Gobierno de Bogdan para realizar convenio alguno.
Irregularidades
Ahora bien, de ser cierta toda esta información difundida por la propia Municipalidad, el Poder Ejecutivo incurriría en groseras irregularidades que, en algunos casos, podrían llegar a tipificarse como delitos contra la administración pública.
Cabe señalar que el producido de la recolección de residuos, sea clasificado o no, sea del material que sea, una vez recolectado pasa a formar parte del patrimonio público, cuyo tratamiento y disposición es alcanzado por las leyes vigentes en toda su dimensión.
De la misma manera, el intercambio de bienes no es contemplado administrativamente salvo como una venta y una compra, ambas debidamente facturadas por el mismo valor.
De este modo, y de acuerdo a la información recibida, a partir de este “convenio de colaboración”, la gestión Bogdan estaría cometiendo las siguientes irregularidades:
1. Encubrir un negocio de compra y venta bajo la figura de un convenio de inexistente colaboración.
2. Disponer del patrimonio municipal sin la debida aprobación del Concejo Deliberante.
3. Realizar compras sin cumplir con los debidos procesos administrativos.
4. Evadir subrepticiamente todos los controles municipales.
Si bien es cierto que en pasadas administraciones fue común la práctica de este tipo de negocios, también es cierto que muchas de ellas terminaron en la Justicia con sus autores procesados.
Norman Robson para Gualeguay21