Informe climático al 4 de julio
La última quincena del mes de junio no presentó lluvias de importancia, lo cual no remite a una situación de ambiente seco sino más bien todo lo contrario, dado que en este período continuaron prevaleciendo las masas de aire húmedo.

Las lluvias fueron reemplazadas por muchas jornadas con nieblas y neblinas, haciendo muy eficiente el rocío. Este proceso repetido, en muchos casos fue detectado por las estaciones automáticas de la red de la BCER, las cuales tienen una precisión de un par de décimas de milímetros. Estas mediciones, muchas veces no son tenidas en cuenta por las observaciones convencionales. En definitiva esos modestos registros han acumulado algunos milímetros dispersos en la geografía entrerriana en estas últimas dos semanas, siendo las nieblas el principal inconveniente que el ambiente húmedo ha generado.
Las lluvias del mes de junio, fundamentalmente acumuladas en la primera quincena, fueron más importantes sobre el este. Sobre el centro norte y el oeste en general los aportes pluviales fueron más modestos y en muchas localidades de este sector no se alcanzaron las marcas normales. Es decir a pesar del predominio del ambiente húmedo, esto no necesariamente se tradujo en sistemas precipitantes destacados, lo cual evidencia cierta estabilidad de la atmósfera media, no solo en el oeste entrerriano, sino en gran parte del sur correntino, SF, CB y LP. Como es notorio, la sobreabundancia de lluvias más destacada se concentró en el norte de la Mesopotamia y en la naciente de los principales afluentes del Paraná y Uruguay, algo que con el correr del mes de julio se reflejará en el caudal de estos ríos, presionando en las costas desbordes generalizados, principalmente en áreas del delta.
El corto plazo presenta el retorno de las precipitaciones más que nada en la jornada del sábado.
Las lluvias modestas de la última parte de junio han permitido que las zonas donde los suelos saturados se mostraban persistentes, lentamente se encaucen hacia un estado normalizado, optimizando el nivel de reservas. Esto en algunas zonas del sudeste de la provincia quizá llegue algo tarde, principalmente para aquellos productores que tenían intención de hacer algo de trigo. A gran escala la provincia no presenta limitantes hídricas de importancia. Aparece el departamento Federal como epicentro del comienzo de un retroceso más marcado de las reservas, sin que por lo pronto este sector demande un nivel de lluvias que no pueda aparecer con el correr del mes de julio.
La oferta de agua que puede llegar en la jornada del sábado de la mano del desarrollo de un sistema de baja presión en la zona, puede dejar registros de importancia en el nor noreste de la provincia. Si bien se espera que las lluvias sean generalizadas, es posible que el máximo pluvial tienda ubicarse en el noreste y el mínimo hacia el sudoeste. Algunas tormentas en el noreste pueden ser intensas, perdiendo eficiencia hacia el sur.
Con acumulados de lluvia del orden de los 20 milímetros, la zona que presenta reservas óptimas vuelve a los excesos. Este volumen de agua no se descarta que se observe el sábado sobre los departamentos linderos del rio Uruguay, quizá tomando Tala y Gualeguay. Federación y Concordia podrían superar estas marcas, al tiempo que la franja oeste no superaría esta barrera que proponemos como guía para cuantificar la posible oferta de agua. Este pronóstico puede mostrar variantes en la oferta de agua según sea la trayectoria del sistema de mal tiempo. Visto desde hoy, hay que esperar un patrón de lluvias similar al descripto.
BCER