Pronóstico incierto

Con el objeto de iluminar un poco el oscuro escenario político, comparto con ustedes lo que se sabe de cada propuesta y lo que se percibe en la calle sobre cada una de las mismas de cara a las próximas elecciones.
Más allá de que cada uno negará y condenará este antojado panorama, el cual parece más una caricatura tragicómica de la realidad política local, lo cierto es que cada partido es un conventillo hueco de proyectos y con internas que se asemejan a patéticas parodias sin ninguna proyección política digna de los argentinos.
El oficialismo
Independientemente de que algunos todavía sueñen con el sueño entrerriano, hoy casi nadie puede negar que el oficialismo, a nivel nacional, crece de la mano de Daniel Scioli, quien en la provincia, crease o no, ha dejado todo en las sabias manos del Pato, con delfín a definir.
De este modo, el Frente para la Victoria corre con el caballo del comisario, mientras que en lo local, después de las internas, todos estarán forzados a correr con Urribarri, con o sin su bendición, algo que ya no asusta a los gualeyos después del antecedente de la 14.
Así es que el Errismo, de futuro incierto por más que el joven Mauro Urribarri mande encuestas y más encuestas pretendiendo convencer de lo contrario, pareciera querer imponer la figura de la victoriense Secretaria de Desarrollo Social, Paola Rubattino, aunque, en secreto, muchos coinciden en que el único capaz de hacer una elección digna sería el hermano del intendente, Sebastián.
Por el lado del archienemigo de Erro, el Diputado Hernán Vittulo, éste pretende hacer campaña con la figura de Mauricio Orgambide, ex Director del Hospital San Antonio. Todo un desafío para el bioquímico lidiar con el lastre del controvertido legislador, aunque se descuenta que esto poco le interesaría, ya que las fichas están puestas solo en colocar a su esposa, Vanessa Parissi, como Diputada.
Muy distinta es la situación del Diputado Juan José Albornoz, del Movimiento Evita, quien reconoce la intrascendencia a nivel local de su precandidatura, pero su única intención sería cumplir en sumar votos a la candidatura nacional de Jorge Taiana.
Por último, en lo que hace al FPV, se presume que el Senador Rubén Matorras no miraría todo esto por TV, y se comenta que desde hace un tiempo viene trabajando para conformar una propuesta dentro del mismo oficialismo.
La oposición
Por el lado de la UCR, en el oficialismo, el Diputado Julián Rubio, presidente del partido y viejo aspirante a intendente, se propone a la cabeza de una fórmula, mientras mantiene intensas gestiones, secretas e inconsultas, tanto con el PRO como con diferentes líneas del massismo.
Esta impronta del legislador radical ya le habría costado cálidas peleas internas que han enrarecido la casa radical e, incluso, han espantado a algún que otro referente.
Esta porción del radicalismo, a favor de alianzas extrapartidarias, está alineada con Atilio Benedetti a nivel provincial y, hasta donde se sabe, todo estaría dado para compartir el número de lista con el PRO de Alfredo De Angeli a nivel provincial y quienes finalmente asuman un papel protagónico en el PRO local.
Como contraposición, los chicos del Involucrarte de Hugo Lesca ya habrían adelantado que presentarán candidato para las PASO sin ningún tipo de alianzas extrapartidarias, mientras que se presume que podría ser precandidato el joven Efraín Martínez Epele.
Por otro lado, el PRO local, otrora en manos del muy joven Luciano Crespo con el inmigrado radical Héctor Jaime, hoy se encontraría en manos de los autodenominados “Históricos”, quienes liderados por el ganadero Juan Carlos Borro y el ruralista Francisco Morcchio aún no definen si inclinarse por el ex intendente o por la solidaria figura de Federico Bogdan, siempre detrás de las figuras de Alfredo De Angeli y Mauricio Macri.
Se intuye que en esta encrucijada prevalecería la figura del Negro Jaime, precandidato natural a la intendencia, por sobre la de Federico Bogdan, lo que obligaría al empresario transportista a migrar nuevamente hacia alguna otra propuesta política.
Por último, por el lado del massismo, recibirían con los brazos abiertos la figura de Bogdan, la que le serviría a Fabio Akiki, operador de Adrián Fuertes en Gualeguay, para consolidar una propuesta fuerte cerrando filas con Mauricio Balbuena y Gustavo Vico.
La gente
Ahora bien, por el lado de la gente, la cual se sabe en un año electoral pero que no recibe mensajes claros y serios, se percibe una inquietante incertidumbre con marcadas tendencias, para uno y otro lado.
Tal es así que los simpáticos del oficialismo kirchnerista no encuentran una propuesta que satisfaga sus expectativas en cuanto a desarrollo, sino que ven, por lo menos en el errismo y en el vittulismo, mucho más de lo mismo, descartan la propuesta de Albornoz y aguardan expectantes lo que pueda llegar a ofrecer Matorras.
Por el otro lado, quienes ya se encuentran desencantados o hartos buscan desesperadamente una propuesta en todo el arco opositor sin hallarla.
Muchos vecinos ven hoy con buen grado las propuestas opositoras nacionales y provinciales, pero no se ven seducidos por ninguno de los reflejos locales de estas, ni por la recalcitrante derecha, ni por los rejuntes totalitarios, ni por las inexpertas combinaciones, ya que ven en todas las alternativas preocupantes perspectivas de ingobernabilidad.
Conclusión
En definitiva, el gran silencio imperante solo se debe a la falta de propuestas, a la falta de trabajo político, y, en especial, a la falta de recursos, tanto financieros como humanos.
Mientras el dilema hoy, tanto para oficialistas como opositores, es encontrar un proyecto que seduzca a los vecinos, estos se debaten en la incertidumbre sobre qué pasará.
Por lo tanto, hasta tanto alguno se despegue de la mediocridad general con una propuesta a la altura de las expectativas, el pronóstico es absolutamente incierto.
Norman Robson para Gualeguay21