Advierten una libertad de prensa amenazada
Dias pasados, en su 59ª Asamblea anual, la Comisión de Libertad de Prensa de ADEPA dio a conocer su informe semestral donde denuncia “los atropellos y las descalificaciones que alteran la libertad necesaria para ejercer adecuadamente el oficio periodístico”, y recuerda las graves declaraciones de funcionarios públicos oficialistas que se multiplicaron en el último semestre. De igual modo, celebró el Premio Nobel de la Paz 2021 con que fue reconocida la periodista filipina Maria Ressa, y recordó su frase: “Si uno quiere arrancarle el corazón a la democracia, hay que perseguir los hechos”.
Este trabajo, presentado por el.propio presidente de la comisión, Daniel Dessein, se señala que, hoy, “la Argentina atraviesa una etapa de extraordinaria aceleración histórica, con un horizonte cargado de incertidumbre”, a la vez que considera que, “en esos contextos debemos redoblar los esfuerzos para preservar el vigor de los mecanismos de debate y resolución de conflictos con que cuenta una sociedad y evitar así caer en el precipicio que nos lleva al autoritarismo y al colapso de nuestro proyecto colectivo”.
En este sentido, el informe enuncia las manifestaciones del Ministro de Seguridad de la Nación contra el dibujante Nik, las de la Vicepresidenta diciendo que los argentinos merecían mejores medios, las del diputado hijo de la anterior culpando al periodismo por la inseguridad, las de un intendente del conurbano bonaerense vaticinando un levantamiento del pueblo contra los medios, y las de un jefe de Gabinete bonaerense sosteniendo que los medios influyeron en la cantidad de muertes.
Del mismo modo, este trabajo señala que las cifras públicas más recientes sobre la distribución de la publicidad estatal nacional del último año “exhiben desproporciones que, en ciertos casos, no se condicen con criterios objetivos como los niveles de audiencia, que subestiman a determinados medios o que relegan al periodismo del interior”.
Al mismo tiempo, advierte que por lo expuesto, más el copie y pegue de sus noticias en el universo digital, y las fake news, los medios argentinos pierden combustible imprescindible para funcionar debidamente en el momento en que las sociedades más los necesitan”. Es por esto que entiende necesario “lograr equilibrios en ese aspecto, como también recomponer un volumen que hoy es sustancialmente inferior al promedio de las últimas dos décadas”.
Como contraprueba de esta realidad que se vive en el país, el documento recuerda que la semana pasada se presentaron los resultados 2021 del Índice de Chapultepec, barómetro de la Sociedad Interamericana de Prensa que mide los niveles de libertad de prensa en el continente americano, y resalta que la Argentina presentó una caída pronunciada respecto de mayo de 2020. Entre los factores que inciden en esta realidad, el informe menciona el acoso judicial a periodistas, y señala como.ejemo el caso de Daniel Santoro, entendiendo que “una espada de Damocles que vuelve a colocarse sobre la cabeza de quienes se atrevan a investigar la corrupción”.
En este marco, el informe de ADEPA recuerda que “el periodismo argentino es reconocido internacionalmente por su calidad, su vigor y su diversidad”, y que otras democracias del mundo desarrollado “han apoyado decididamente a sus medios de comunicación en esta etapa de fragilidad”, al grado de que, después de 86 años, el Premio Nobel destacó la relevancia de la libertad de prensa en nuestras sociedades, especialmente en aquellas donde la intolerancia, la desinformación y la polarización son una constante amenaza.
Por último, este documento destaca que “la información y la libertad para intercambiar opiniones fueron, y siguen siendo, insumos imprescindibles para que el mundo enfrente el flagelo”, y que “nuestra nación, como cualquier otra que aspire a vivir en libertad, debe reconocer los hechos y problemas fundamentales sobre los que debe decidir, debatir posibles soluciones, arribar a consensos y, finalmente, trazar un rumbo”.
Gualeguay21