Cada vez más jóvenes se quedan con las ganas de estudiar
Según el informe “Educación y trabajo: expectativa y realidad de jóvenes en Argentina”, realizado por el Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Flavia Ferrari Inchauspe y Eugenia Orlicki, 8 de cada 10 jóvenes quieren seguir estudiando tras la secundaria, pero solo la mitad lo hace. Este documento indaga en las expectativas y en las trayectorias educativas y laborales de los jóvenes en Argentina tras finalizar la escuela, y descubre que hay grandes disparidades de expectativas y de oportunidades educativas y laborales para los jóvenes de distintos niveles socioeconómicos.
De acuerdo a este trabajo, en el último año de secundaria, el 85 porciento de los estudiantes afirma que planea seguir estudiando y el 65 porciento dice que quiere trabajar luego de terminar la escuela. Sin embargo, muchos no logran concretar esos planes: entre los jóvenes de 19 a 25 años, solo 4 de cada 10 (38 porciento) estudian y 4 de cada 10 (38 porciento) trabajan, habiendo terminado la secundaria.
Para dimensionar las expectativas, se utilizaron las respuestas de los alumnos del último año de secundaria a los cuestionarios complementarios de las pruebas Aprender 2022. Para relevar las trayectorias educativas y laborales de los jóvenes de 19 a 25 años, se tomaron los datos de la Encuesta Permanente de Hogares de 2023.
En Argentina, los jóvenes que se encuentran en el último año de secundaria expresan altas expectativas de continuar sus estudios. El 33 porciento del total de los alumnos del último año de secundaria planea solo estudiar, el 52% estudiar y trabajar, el 12 porciento solo trabajar y el 3 porciento tiene otros proyectos: en total, el 85 porciento planea estudiar y el 65 porciento trabajar.
Sin embargo, entre los jóvenes de 19 a 25 años, solo 3 de cada 4 (74 porciento) terminaron la escuela secundaria. En esa franja etaria, hay un 25 porciento de jóvenes que se dedica solo a estudiar, un 13 porciento que trabaja y estudia, un 25 porciento que solo trabaja y un 12 porciento que no trabaja ni estudia. Esto implica que solo 4 de cada 10 jóvenes (38 porciento) de 19 a 25 años continúan sus estudios tras finalizar la escuela secundaria.
Las oportunidades educativas y laborales se ven marcadas por los recursos económicos. Entre los jóvenes del decil más alto, son más los que logran concretar sus expectativas: el 51 porciento se dedica a estudiar (el 27 porciento solo estudia y el 24 porciento también trabaja), mientras que el 68 porciento trabaja (41 porciento solo trabaja, y 27 porciento trabaja y estudia en el nivel superior). En cambio, en los sectores más bajos, el porcentaje de quienes siguen estudiando disminuye a 21 porciento: el 19 porciento solo estudia y el 2 porciento también trabaja, mientras que un 12 porciento solo trabaja.
La probabilidad de que los jóvenes accedan a trabajos de calidad es considerablemente mayor entre quienes terminaron el nivel secundario y en los deciles más altos. El 13 porciento de los jóvenes de entre 19 y 25 años tiene un empleo de calidad (entendido como un trabajo de más de 30 horas semanales y con descuento jubilatorio) cuando termina la secundaria. En tanto, los ocupados en empleos de calidad con secundario incompleto son sólo el 2 porciento de los jóvenes de 19 a 25 años. Entre los jóvenes del decil más alto, el 42 porciento de ellos son ocupados con empleos de calidad, mientras que la cifra desciende al 2 porciento en el decil más bajo.
Gualeguay21