Caso Casualde: Cámara de Gualeguaychú apuró la revinculación con sus hijos
Según se supo hoy, luego de meses sin poder ver a sus hijos, y de éstos sin poder ver a su padre, la Cámara de Apelaciones de Gualeguaychú, en el marco de una demanda apelada por Juan Casualde de un régimen de comunicación con sus hijos, ordenó al Juzgado de Familia local que resuelva urgente, sin dilaciones, la vinculación de éste con sus hijos. Según la resolución, ese Tribunal tuvo en cuenta el interés superior del niño y, en particular, los derechos de éstos.
El pasado 10 de noviembre, la Cámara de Apelaciones, Sala Primera Civil y Comercial, de Gualeguaychú, conformada por la Dra. Valeria María Barbiero de Debeheres, el Dr. Marcelo José Arnolfi, y la Dra. Ana Clara Pauletti, se expidió sobre la apelación de Casualde por un régimen de comunicación con sus hijos.
La medida apelada fue una resolución del Juzgado de Familia de julio de este año, cuando el padre ya llevaba meses impedido de contacto con sus hijos. El pedido fue “considerado improcedente, sosteniendo que el Juzgado se encontraba abocado intensamente a resolver el problema comunicacional”.
Según los fundamentos vertidos por la Dra. Barbiero en la nueva medida, en una audiencia del 6 de julio, el Juez, frente al Defensor de Menores, había determinado que de inmediato debía hacerse lugar a las visitas de los niños a su progenitor, pero, desde entonces, idas y vueltas entre el Juzgado y la Defensoría dilataron la concreción del encuentro. Luego, Casualde fue ingresado a la Unidad Penal N° 7, de Gualeguay, y la visita se postergó aún más.
En el mismo sentido, la Dra. Barbiero también resaltó la vulnerabilidad de los niños en cuestión, señalando que “los niños poseen los derechos que corresponden a todos los seres humanos y tienen además derechos especiales derivados de su condición a los que corresponden deberes específicos de la familia, la sociedad y el Estado”.
Por otro lado, también hizo referencia a que “el interés superior del niño opera como un principio de máxima jerarquía normativa como un verdadero ariete destinado a quebrar obstáculos formales, más aún, frente a la existencia de tres niños en condición cierta de vulnerabilidad”.
De ese modo, la Dra. Barbiero entendió que “deberá resolverse el régimen de comunicación solicitado conforme a la nueva situación y como cuestión urgente que no admite más dilación”, a lo cual disidió el Dr. Arnolfi y adhirió la Dra. Pauletti. De ese modo, se resolvió, por mayoría, “remitir los autos al juzgado de origen (Juzgado de Familia Gualeguay) para que resuelva, conforme a la nueva situación, sobre el régimen de comunicación sin más dilación”.
Gualeguay21