Crece el reclamo por la extracción de arena del río
Desde hace unas semanas viene creciendo en nuestra ciudad una movida en defensa del río y en contra de las areneras. A partir de reuniones autoconvocadas entre gente preocupada por la realidad del Gualeguay, fue tomando fuerza la necesidad de participar activamente en favor de normalizar un tema que todos saben que está descontrolado, perjudicando el ambiente, y degradando el futuro de nuestra hijos y nietos. Cómo surgió, qué hicieron y con qué resultados.
El pasado jueves 5 de octubre, en cumplimiento de la ley, la Secretaría de Ambiente de la Provincia de Entre Ríos publicó en el diario local una convocatoria por la cual se informó a la ciudadanía que toda la información sobre la Arenera Vita estaba disponible en su página web, y se la invitó a realizar cualquier planteo o reclamo dentro de los 5 días hábiles. De no mediar noticias, a la arenera se le podría extender la habilitación, y seguir trabajando.
Esta publicación fue el disparador que alentó a un grupo de vecinos a interiorizarse en el tema y, así, tomar cartas en el asunto, ya que la extracción de arenas del río Gualeguay está totalmente liberada, sin control alguno, a diferencia de lo que ocurre en otras ciudades, donde, directamente, la actividad está prohibida.
A partir de entonces, y rápidamente, se celebraron una serie de reuniones, a las cuales se fueron sumando más y más vecinos preocupados, y, de allí, surgió la iniciativa de responder la convocatoria de Ambiente provincial. El ánimo general, básicamente, fue atacar la extracción desmedida y descontrolada de ese recurso, en especial aguas arriba, afectando las costas de la ciudad. En síntesis, los vecinos se propusieron pedir la suspensión de permisos, mientras se decide su reubicación, o la prohibición definitiva de la extracción.
De ese modo, no fueron pocos los correos enviados a la Secretaría de Ambiente provincial informando y reclamando por las violaciones de la arenera Vita a lo permitido por esa misma cartera, y el impacto de ésta conducta en el ambiente.
Finalmente, la respuesta de la Secretaría fue rápida. La Ing. María Daniela García acusó recibo de los mails y adelantó que darán intervención a Prefectura Naval Argentina, que suspenderán la emisión del certificado ambiental, y que notificarán a la empresa sobre el cese preventivo de su extracción mientras se evalúa la situación.
Ahora bien, conociendo, o sospechando, cómo se resuelven estas cosas entre empresas y políticos, nada está dicho, y a nadie le sorprendería que la arenera siga operando, razón por la cual los vecinos insisten en difundir la situación, de modo de que se instale una fuerte presencia social en el tema, que fuerze a las autoridades a obrar estrictamente según lo establecido por la ley.
Norman Robson para Gualeguay21