Del Negro De Los Santos al Licha Martínez: un siglo de fútbol entrerriano
El 28 de septiembre de 1922, en Río de Janeiro, Brasil, la Selección Nacional debutó en el Campeonato Sudamericano de Selecciones goleando a Chile. De ese equipo fue parte Alejandro Nicolás de los Santos, el Negro, nacido en Paraná el 19 de mayo de 1902. Este domingo, 18 de diciembre de 2022, un siglo después de aquel debut, Argentina juega la final de la Copa del Mundo contra Francia. Integra esta Seleccion Nacional el entrerriano Lisandro Martínez. Desde el Negro hasta el Licha, fueron muchos los panzas verdes que se destacaron en el fútbol argentino.
Unos años después, el sábado 21 de enero de 1933, en el estadio Centenario de Montevideo, jugaron un amistoso las selecciones argentina y uruguaya. En el equipo nacional ya eran dos los jugadores entrerrianos: Alberto Zozaya y Enrique Guaita. Por entonces, el fútbol nacional nacía al mundo. Desde aquella época del Negro De Los Santos, de Don Padilla Zozalla, y del Indio Guaita, hasta este presente del Licha Martínez, transcurrió todo un siglo de historia, 100 años de presencia entrerriana en el futbol argentino. No es poca cosa.
Guaita había nacido en Lucas González el 15 de julio de 1910, y Zozaya en Urdinarrain el 13 de abril de 1908. Juntos se sumaron a Estudiantes en el 29, y conformaron la famosa línea de ataque Los Profesores, junto a Alejandro Scopelli, Miguel Ángel Lauri y Manuel Ferreira. En el 32, Zozaya fue goleador en el primer campeonato profesional de la historia. En el 33, los dos fueron convocados para la selección albiceleste, pero para el mundial del 34, Guaita jugó para la Azurra italiana y fue campeón del mundo.
Estas últimas historias se suman a la del Negro De Los Santos como génesis del futbol provincial. Desde aquel entonces, la provincia de Entre Ríos, desde sus cuatro puntos cardinales, comenzó a nutrir de grandes jugadores al fútbol nacional. Algunos de éstos que vistieron la albiceleste fueron los siguientes:
Juan Carlos Colman, el Comisario, nacido en Concordia el 15 de diciembre de 1922, debutó en Newells en 1945 y en la Selección en 1950.
Roque Raúl Alfaro, nacido en Nogoyá el 15 de agosto de 1956, debutó en Newell’s en 1974 y en la Selección en 1976, y participó de la Copa América 1987.
Jorge Luis Burruchaga, nacido en Gualeguay el 9 de octubre de 1962, debutó en Arsenal de Sarandí en 1979 y en la Selección en 1983, y participó en las Copas América 1983 y 1989, y en los Mundiales 1986 y 1990, resultando Campeón del Mundo.
Daniel Toribio Aquino, el Toro, nacido en Chajarí el 9 de junio de 1965, debutó en 1985 en Banfield y en la Selección en 1988.
Ramón Ismael Medina Bello, nacido en Gualeguay el 29 de abril de 1968, debutó en Racing en 1986 y en la Selección en 1990, y participó de las Copas América 1991 y 1993, y del Mundial 1994.
José Antonio Chamot, nacido en Concepción del Uruguay el 17 de mayo de 1969, debutó en Rosario Central en 1988 y en la Selección en 1993, y participó en la Copa América 1995 y en los Mundiales 1994, 1998 y 2002.
Roberto Fabián Ayala, el Ratón, nacido en Paraná el 14 de abril de 1973, debutó en Ferro en 1990 y en la Selección en 1994, y participó en las Copas América 1995, 1999, 2004 y 2007, y en los mundiales 1998, 2002 y 2006.
Gabriel Iván Heinze, nacido en Crespo el 19 de abril de 1978, debutó en Newell’s Old Boys en 1997 y en la Selección en el 2003, y participó de las Copas América 2004 y 2007, y de los Mundiales 2006 y 2010.
Wilfredo Caballero, nacido en Santa Elena el 28 de septiembre de 1981, debutó en Boca en el 2002, fue convocado a la Selección en 2014, y participó del Mundial 2018.
Facundo Sebastián Roncaglia, nacido en Chajarí el 10 de febrero de 1987, debutó en Boca en el 2007 y en la Selección en 2013, participando en las Copas América 2015 y 2016.
Milton Casco, nacido 11 de abril de 1988, debutó en Gimnasia y Esgrima La Plata en el 2009 y en la Selección en 2015, y participó en las Copas América 2015 y 2019.
Pero eso no es todo. Como si todo aquello fuera poco, y aunque no vistieron la celeste y blanca, otros también dejaron su huella. Juan José Rodríguez, el Yaya, nacido en General Galarza el 11 de enero de 1937, se destacó en Boca y en Racing, ganando la Intercontinental en 1967, y Oscar Enrique Posenatto, el Gato, nacido en Gualeguay el 11 de febrero de 1942, se destacó en San Lorenzo en los sesenta.
Otro párrafo merece Joaquín Andrés Irigoytía, nacido en Paraná el 15 de agosto de 1975, que debutó en River en 1995 y fue arquero de la Selección campeona en el Mundial sub20 de ese mismo año. También dejaron lo suyo Juan Ramón Comas, Comitas, Omar Abel Bordet, Víctor Hugo Marchesini, Guillermo Daniel Ríos, Gustavo Buena, y Luis Ramón Abdeneve.
Ahora bien, más allá de los futbolistas exitosos dentro de la cancha, hubo un entrerriano que se destacó a un costado. José Néstor Pékerman. Este entrerriano nació en Villa Domínguez el 3 de septiembre de 1949, pero a los tres meses su familia se trasladó a Ibicuy. Allí creció hasta que, a los 12 años, se mudaron a Buenos Aires, y comenzó a jugar en Argentinos Juniors, donde debutó en 1966.
Pero su mejor desempeño lo logró como entrenador. Su carrera comenzó debutando en 1981 al frente de Chacarita Juniors hasta que dirigió la selección Argentina sub-20, con la cual ganó los mundiales 1995, 1997 y 2001, y luego dirigió a la Selección mayor en el mundial 2006, dónde la sacó cuarta. Hoy es un destacado técnico de selecciones.
De este modo, hasta el momento, la usina futbolística entrerriana ha dado a luz enormes exponentes del fútbol argentino, entre los que se destacan tres campeones del mundo: el Indio Guaita, jugando para Italia en 1934, el Burru, jugando para Argentina en 1986, y Pekerman, dirigiendo a la sub20 argentina en 1995, 1997 y 2001.
Este domingo, la Selección Nacional enfrenta a su par francesa por la final de la Copa del Mundo Qatar 2022. Es parte de ese equipo Lisandro Martínez, Licha, o “the butcher” (el Carnicero), como lo bautizaron en Europa. Este defensor nacido en Gualeguay el 18 de enero de 1998 debutó en Newells en 2017 y en la Selección en 2019, y ya ganó la Copa América 2021. Con él se completa la producción futbolística entrerriana en un siglo, pero el semillero panza verde no descansa y, seguramente, la provincia dará a luz nuevos exponentes.
Norman Robson para Gualeguay21