Informe climático del 26 de julio
La semana que comenzó el miércoles 17 se mantuvo con algunas precipitaciones menores y lloviznas que se proyectaron a las jornadas subsiguientes con tránsito alternado de nubes bajas que mantuvieron los niveles de insolación en valores reducidos. A partir del viernes una masa de aire polar comenzó a hacer sentir su presencia, lo cual rápidamente se tradujo en registros térmicos muy bajos en toda la provincia.
La semana quedó marcada por esta irrupción de aire polar, la cual tuvo una extensión amplia cubriendo todo el país e incluso tomando la zona agrícola del este de Paraguay y el sur de Brasil. Sobre Entre Ríos los amaneceres del domingo y lunes fueron los más rigurosos, aunque la sensación de frío se vio acrecentada en momentos en que el viento fue más intenso. Las temperaturas se ubicaron muy por debajo de los valores medios del mes de julio, aunque la franja mediterránea del país padeció con mayor intensidad el rigor ambiental.
Las reservas de humedad no se han modificado sustancialmente. Las mismas seguramente han retrocedido en los primeros centímetros de suelo, sin embargo el perfil se sostiene en niveles adecuados para el desarrollo de los cultivos de invierno, con mayor margen sobre el centro este de la provincia.
Las perspectivas para los próximos días presentan una tendencia firme pero lenta hacia la recuperación de los registros térmicos. La temperatura máxima tendrá un crecimiento más evidente, prevaleciendo los amaneceres fríos.
Por lo pronto no se proyectan precipitaciones y como se perfila la circulación para los próximos días, es altamente probable que el mes de julio ya no presente lluvias. De este modo habrá que esperar a los primeros días de agosto para saber como evoluciona la oferta de agua, sin que se observe una demanda perentoria en las áreas trigueras principales de la provincia.
BCER