Las urgencias no esperan. Por horas no hubo pediatra de guardia en el hospital San Antonio
Hoy martes, pasado el mediodía, una emergencia obligó al único médico pediatra de guardia en el hospital San Antonio a dejar el servicio para acompañar a un pequeño paciente en su traslado a otra ciudad. A raíz de esta situación, no hubo pediatra de guardia hasta entrada la noche, y las mamás que por distintos síntomas de sus criaturas requirieron el servicio de pediatría de guardia debieron esperar horas y horas. Esta ausencia pone en riesgo potenciales enfermos que puedan precisar el servicio.
Según se pudo saber, el problema comenzó hoy alrededor de las 13:30 horas, cuando el único profesional pediatra presente debió acompañar un traslado de urgencia, abandonando así la guardia pediátrica, sin ningún otro médico en su lugar. Ya desde las 14 horas mamás y pequeños pacientes con dolencias de distinto tenor, comenzaron a demandar un pediatra, se les informó que no había, y que recién habría para las 17 horas.
Pero para las 5 de la tarde la situación era la misma, y quienes llegaron al nosocomio con sus niños en busca de atención recibieron por respuesta que recién llegaría para la noche. Para evitar se trasladen nuevamente con sus criaturas, se les indica que antes llamen por teléfono. Poco antes de las 21 horas, una de las mamás que aguardaba angustiada que su criatura de 2 años afiebrada fuera atendida se comunicó con el nosocomio, y le informaron que aún no había pediatra.
De este modo, el único servicio de urgencias pediátricas del único efector público de salud de nuestra ciudad, el Hospital San Antonio, no contó con un profesional que atendiera la demanda de pequeños pacientes que durante horas esperaron ser atendidos. Resulta inconcebible que una ciudad de 45 mil almas no cuente con un servicio que pueda resolver cualquier emergencia de salud de alguno de sus 4 mil gurises chicos.
Gualeguay21