Llega a Casación la causa contra Aldo Díaz
A partir de mañana, la Cámara de Casación Penal de Paraná comenzará a revisar la condena que pesa sobre Aldo Alejandro Díaz por abuso sexual agravado. La misma fue impuesta en 2022 por el Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguay luego de un proceso plagado de mentiras y curiosas omisiones. Con nueva representación legal, Díaz tendrá la oportunidad de hacer valer la verdad sobre los hechos por los que lo acusó una expareja.
Según obra en la causa, al cabo de aquella primera instancia, el tribunal, conformado por los jueces Dardo Oscar Tórtul, Roberto Javier Cadenas y Darío Ernesto Crespo condenó a Díaz a la pena de 14 años de prisión por los delitos de abuso sexual agravado por acceso carnal reiterado y lesiones graves psicológicas agravadas por mediar violencia de género.
A pesar de la incoherencias y contradicciones, en la sentencia se sostuvo que “se tuvo por fehacientemente acreditada tanto la materialidad de los hechos como así también la autoría del inculpado Alejandro Aldo Díaz”, ignorando que el caso estaba claramente cruzado por cuestiones políticas. “Nada más alejado de la realidad de los eventos”, sostuvieron.
Cabe recordar que esta causa se inicia en 2020 por la denuncia de quien hacía poco había roto con Díaz una relación de dos años. En la misma, la expareja expuso una relación cruzada por la violencia, con sometimiento, y agresiones psicológicas, durante la cual Díaz la obligaba o le prohibía cumplir con ciertas actividades, y hasya la obligaba a injerir pastillas recetadas por un psiquiatra.
En la investigación penal, la fiscalía tipificó todos los hechos según lo denunciado, pero sin validación o corroboración alguna, e ignorando las contradicciones en los testimonios. De ese modo, la Fiscalía acusó a Díaz de “lesiones graves agravadas por mediar violencia de género, relación de pareja anterior, abuso sexual agravado por acceso carnal reiterado y por mediar violencia de género, amenazas reiteradas, violación de domicilio, suministro de material estupefaciente, todo en concurso material entre sí”, y pidió una condena de 16 años.
De este modo, en el juicio, el Tribunal consideró válido todo lo expuesto por la Fiscalía y la querella, y despreció lo poco expuesto por la defensa, curiosamente permisiva ante los descabellados planteos acusatorios. Cabe recordar que fue un artículo de Gualeguay21 el que expuso muchas de las mentiras expuestas en el juicio, razón por la cual su director fue procesado por violencia de género simbólica y mediática.
Por último, en esta segunda instancia, Díaz, ahora representado por la abogada Corina Beisel, podrá exponer ante un Tribunal de Casación, y luego frente al Superior, las pruebas de su inocencia. Solo así podrá evitar ser una víctima más de la Justicia de Gualeguay.
Norman Robson para Gualeguay21