San Patricio: Una celebración religiosa convertida en fiesta de la colectividad
Cada año, el 17 de marzo, la colectividad irlandesa se viste de verde esmeralda por el Día de San Patricio, Saint Patrick’s Day, en inglés, una celebración varias veces centenaria de aquella isla europea. Se trata de una celebración religiosa que data de 1631, en conmemoración de la muerte, en el siglo V, del misionero al que se atribuye la difusión del cristianismo en Irlanda. Por ese motivo, el 17 de marzo es un día de solemnidad en Irlanda, aunque sin desfiles y sin convertir todo en color verde como en Estados Unidos, donde los inmigrantes hicieron de la fecha una fiesta de la colectividad.
De una u otra manera, las colectividades del mundo aprovechan, con más o menos fiesta, la oportunidad de rescatar y celebrar su origen irlandés.
El santo patrón de Irlanda, nacido a finales del siglo IV, no era irlandés, ni se llamaba Patricio, sino que había nacido en un pequeño pueblo escocés, y se llamaba Maewyn Succat. Según cuenta la leyenda, Maewyn fue secuestrado por piratas y vendido como esclavo en Irlanda cuando apenas era un adolescente. Allí lo explotaron como pastor hasta que consiguió escaparse a Francia, donde se ordenó como sacerdote con el nombre de Patricius.
A los 46 años, su vocación religiosa llevó al padre Patricius de vuelta a Irlanda para evangelizar a sus habitantes y crear diversos colegios, iglesias y monasterios. De ese modo, rebautizado Patrick, el religioso se convirtió en la primera persona que predicó el cristianismo en la isla, tierra pagana por aquel entonces, y que hoy en día es el tercer país con más católicos de occidente, después de Italia y España.
Luego de una gran labor evangelista, el 17 de marzo del año 461, en Saul, Downpatrick, el padre Patrick falleció, y, con el correr de los siglos, en 1780, Irlanda lo erigió como su santo patrón, y, recién desde 1903, se celebra en esa fecha el Saint Packs Day, el Día de San Patricio.
Como la isla, gracias a él, es mayormente católica, y como la fecha de su muerte cae en plena Cuaresma, no se permitía la venta ni el despacho de whisky o cerveza. Así fue hasta que, en la década de 1970, las leyes irlandesas permitieron que los pubs abrieran el 17 de marzo, y, a partir de 1995, el Día de San Patricio pasó a ser una cuestión de estado como parte de una política pública orientada a mostrarle Irlanda y su cultura al resto del mundo.
De ese modo, en el resto del mundo, las distintas colectividades irlandesas hicieron de esta fecha una fiesta de identidad, y, para ello, instalaron el verde esmeralda, el shamrock, ese trébol de tres hojas, y la cerveza. En Australia, Canadá y Estados Unidos, las celebraciones son multitudinarias, parte de la agenda oficial con fiestas y desfiles, mientras que en otros países, como Rusia, Japón y Argentina, la celebración se circunscribe a las propias colectividades, más algunos pubs temáticos de las grandes ciudades.
Gualeguay21