Cosas de agenda
Lograr una reunión con el Ministro de Interior de la Nación, en el seno del círculo rojo presidencial, no es fácil, lo cual lleva a pensar que, cuando se tiene la oportunidad, ésta debe ser aprovechada para abordar aquello que se encuentra a la cabeza de las prioridades.
De este modo, la reunión celebrada en la Casa Rosada donde el Ministro Frigerio recibió a Bogdan y Morchio con los directivos del Club Pelota local para gestionar un aporte económico para un frontón y un Mundial nos ofrece una idea de la agenda del gobierno local.
Vale destacar que la agenda de una gestión es la que expone ante los ciudadanos, no solo sus pretensiones políticas, sino, también, la que desnuda la evolución de la gestión respecto de sus prioridades.
Por otro lado, de ser cierto que el Ministro Frigerio recibió de buen grado los proyectos expuestos por la ciudad y la entidad deportiva, eso nos demuestra que la agenda actual de Bogdan cuenta con el valioso apoyo del Gobierno Nacional.
De este modo, el hecho de que una cancha de paleta y un mundial, de un deporte que apenas convoca a su práctica, de una entidad que no se caracteriza por su alcance popular, estén a la cabeza de las prioridades de una gestión municipal, demuestra el grado de resolución de las típicas problemáticas modernas que sufre cualquier municipio del concierto provincial y nacional.
O sea, destinar una reunión de este tipo para obtener dinero para lo expuesto quiere decir que la comuna ya no necesita recursos para recuperar el balneario, ni para activar el parque industrial, ni para resolver los problemas de cloacas, ni para terminar con el basural a cielo abierto, ni para nada.
O sea, la gestión de Bogdan debe haber terminado con los eternos problemas de empleo, calles, servicios, pobreza, anegamientos, salud, educación, seguridad, etcétera, etcétera, que solían condenarnos.
O sea, si nuestro gobierno se reúne con la cúpula mayor del Gobierno Nacional para pedir plata para un mundial de pelota paleta, sin lugar a dudas, la dirigencia de los demás clubes, que brindan una mayor contención social en los sectores vulnerables, no tienen que juntarse más para vender pollo asado para sobrevivir, y tienen resuelta la contención de miles de gurises.
Ahora bien, si esto no es así, definitivamente, el horizonte del proyecto político que persigue la gestión Bogdan se ha desviado un poco del horizonte de necesidades y demandas de la sociedad gualeya para acceder al desarrollo social y económico que pretende y merece.
Norman Robson para Gualeguay21