El Consejo Empresario alertó sobre la situación
La entidad dio a conocer los resultados de una investigación titulada “El sector público y la economía de Entre Ríos”; el aumento de la presión tributaria y pronósticos perjudiciales para los ahorristas privados, son las claves del informe.
El Consejo Empresario de Entre Ríos dio a conocer los resultados de un informe titulado “El sector público y la economía de Entre Ríos” realizado por el Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de esa entidad. En el mismo, advierten sobre el aumento de la presión tributaria en la provincia y que estos recursos no se traducen en mejores servicios estatales. Alertan sobre el incremento del gasto público, principalmente en salarios, lo que inevitablemente tiende al déficit y finalmente anuncian que la situación derivará en pronósticos muy perjudiciales para los ahorristas privados.
“El Estado provincial de Entre Ríos tiene un alta presión impositiva que se suma a una muchos más alta y distorsiva presión impositiva nacional. En general, esto no se traduce en mejores servicios estatales, porque los recursos que vuelven desde la Nación vía coparticipación y transferencias discrecionales es inferior a lo que los entrerrianos pagan de impuestos.
La gestión del gasto tiende al déficit. Casi todos los recursos que el sector público provincial recibe de la Nación son equivalentes a lo que provincia debe asignar a sueldos y coparticipación provincial. De esta forma, actúa una doble rigidez: 2 de cada 3 pesos de ingresos vienen de la Nación y la misma proporción es lo que a priori ya está comprometido para gastar; los espacios de gestión son reducidos. Esto se agrava por las condiciones de contratación de los empleados públicos, que son muy rígidas para la buena gestión y están impregnadas por la demanda de la población por ser empleados públicos.
Finalmente los déficits se terminan enjuagando en consolidaciones de deuda que terminan licuándose por inflación. Aunque la mecánica parezca para el Estado es muy perjudicial para los ahorristas privados. Por directa o indirectamente toda licuación de un deudor (en este caso el Estado) termina siendo soportada por acreedor (en este caso los ahorristas). Sin mecanismos protectivos de los ahorros, la generación de un mercado de capitales y mecanismos de financiamiento privado de largo plazo es una idea quimérica”, concluyó el informe del Consejo Empresario de la provincia.
Radio La Voz