Informe del estado de las reservas
Jornadas muy estables que se traducen en elevadas tasas de radiación y temperaturas muy rigurosas se vienen sucediendo en la última semana. En particular los últimos días han presentado registros que superaron largamente los 35°C. En el norte de la provincia, las marcas de máximas de ayer orillaron los 40°C.
Esta situación meteorológica es particularmente exigente considerando la pobre oferta de agua que ha tenido la primera parte del mes. La extensión en el tiempo de este magro comportamiento pluvial, sumado al despliegue geográfico que el mismo está teniendo, puede justificarse en parte con la presencia de La Niña. Gran parte de SF, norte de BA, este de CB, NEA, Paraguay, Uruguay y sur de Brasil, vienen padeciendo la falta de agua.
Desde finales de noviembre la circulación atmosférica ha sido impropia para la época, con flujos del norte con muy deficiente transporte de humedad. Recién en las últimas jornadas se está notando el arribo de aire tropical, el cual a pesar de promover condiciones ambientales poco confortables, es vital para dar vuelta este desfavorable patrón pluvial.
El fenómeno de La Niña puede estar causando estos problemas de circulación, lo cual genera una baja frecuencia de sistemas precipitantes y los que eventualmente se concretan lo hacen con milimetrajes muy modestos. Recordamos que este fenómeno estuvo presente durante todo el trimestre previo y si bien se detectaron zonas con marcas pluviales deficitarias, esto no sucedió a gran escala. Por otra parte el mes de diciembre es claramente un mes vulnerable a la falta de lluvias en condiciones como las presentes. Puesto que el fenómeno La Niña no se retira hasta marzo, habrá que confiar en la estadística que marca un menor impacto, o incluso ninguno en las lluvias del mes de enero.
Estado de las reservas al 21/12/2011
El balance hídrico se resuelve con un predominio de la categoría de reservas más baja en casi toda la provincia. Esto puede imaginarse extendido sobre el noreste de BA y gran parte de la provincia de SF. Es decir, un vaso sector de la zona núcleo se halla en dificultades hídricas. Los suelos seguramente están generando diferencias en la disponibilidad de humead con que cuentan los cultivos, principalmente el maíz. Estas diferencias pueden notarse a nivel de lote, pero son complejas de identificar a escala regional. De todos modos, no es necesario abundar en detalles respecto de la imperiosa necesidad de precipitaciones que demanda la mayor parte de la región pampeana, con excepción quizá de los partidos costeros del sudeste de BA.
Las lluvias necesarias para revertir esta situación en el corto plazo, son de registros muy altos y no se asocian a las previsiones. De todos modos el centro sur de la provincia puede haber visto aliviada la situación con las precipitaciones recientes. Un próximo evento recién se proyecta para las últimas jornadas del año o las primeras de enero. En consecuencia, la situación impone resignarse a padecer esta coyuntura climática desfavorable, esperando que el cambio llegue con la primera quincena de enero.
Nuevamente y a pesar de que el panorama para la soja no es el mejor, es el maíz el que lleva la peor parte. Es difícil no hablar de pérdida de potencial de rinde para este cultivo.
Se espera que el cambio de ambiente que se irá concretando luego del pasaje frontal, imponga una situación térmica más aliviada. Al menos esta variable quitará parcialmente el estrés hídrico que han venido padeciendo las sementeras.
Si bien las señales de deficiencias hídricas ya se observaban finalizando noviembre, el mes de diciembre se ha mostrado con una adversidad pluvial muy similar a la del año pasado. Las reservas profundas pueden hacer alguna diferencia favorable.
BCER