Productores preocupados: aseguran que cayeron las exportaciones de cítricos
Las exportaciones de citrus argentino cayeron en lo que va del 2012 entre el 41 y el 88 por ciento, en comparación con igual período del año pasado.
La Federación Argentina de Citrus, en el último de sus informes semanales, precisó que hasta la fecha los pallets de naranjas enviados al exterior registran una baja del 87,74 por ciento, los limones descendieron el 68,42 por ciento y las mandarinas el 41,44 por ciento. La caída es aún más pronunciada si se comparan los meses de 2012 con los de año 2010. El descenso de las exportaciones de naranjas alcanza en ese caso 91,36%, de limones 71,95% y de mandarinas 53,88%, según la noticia publicada por Multimedios Chajarí.
La crítica situación irrumpe, paradójicamente, en un año en el que el sector citrícola exhibe un récord de producción, gracias a los avances en el tratamiento de las quintas y a las favorables condiciones meteorológicas, que elevaron los rindes, dice la noticia.
La merma en las exportaciones impactará de lleno en el mercado interno, puesto que buena parte de la fruta que no sea colocada en el exterior se volcará en las góndolas, dando lugar a una sobre oferta que deprimirá aún más los precios.
La ausencia de rentabilidad torna inconveniente incluso sacar la fruta de las plantas, ya que el precio final, tanto en ventas al consumidor como a industria, no alcanza para recuperar los costos de cosecha y empaque.
De persistir la tendencia, el impacto negativo se hará sentir en la mano de obra ocupada, a la par que se verán afectadas todas las actividades que proveen de insumos y servicios a la citricultura.
Consultado acerca de las causas de la marcada caída que evidencian los informes de Federcitrus, Mariano Caprarulo, director Ejecutivo de la Cámara de Exportadores de Citrus del NEA (Cecnea), precisó que la crisis europea y la pérdida de competitividad han sido los motivos principales de la merma, que indudablemente afectan la rentabilidad del sector.
La Cecnea viene gestionando, en conjunto con los gobiernos provincial y nacional, la apertura de nuevos mercados, lo que, a futuro, repercutiría favorablemente en las ventas. Mirando también al mediano plazo, la entidad trabaja en la elaboración del denominado Plan Estratégico para las Naranjas y Mandarinas del NEA 2012-2017.
“Pero el actual escenario coloca a las empresas en una situación límite, ahogadas por los cada vez más altos costos internos en un contexto internacional que no ayuda”, explicó Caprarulo.
“Ya no hay más tiempo. Urge adoptar medidas que, al menos, detengan la fuerte caída de exportaciones y la pérdida de mercados, que llevó muchos años conquistar y llevará muchos más intentar luego recuperar”, dijo.
Caprarulo resaltó la buena voluntad de las autoridades, con las que se han mantenido innumerables reuniones para analizar diversos cursos de acción, pero lamentó que el buen diálogo no haya dado paso a “medidas concretas”.
“No somos los únicos que la estamos pasando mal. Entendemos que haya cuestiones más urgentes que atender. Pero vemos con preocupación que se deje caer a un sector de la economía con fuerte impacto social en la región, del que dependen decenas de miles de familias entrerrianas y correntinas, y que aporta importantes divisas al país, justo en un momento en que más se necesitan”, continuó.
“Los principales países que compiten con Argentina tienen políticas agresivas de fuerte respaldo del Estado a los productores, además de verse beneficiados por cuestiones cambiarias y por acuerdos de libre comercio. En este contexto, la caída del citrus argentino será inexorable sin un plan de contingencia”, concluyó.