Si gana Scioli…

Por ejemplo, si gana Scioli, tendremos al gobierno nacional con el mismo signo político que el provincial, ambos del Frente para la Victoria, opuestos al ejecutivo local en manos de Federico Bogdan, de Cambiemos.
De este modo, si gana Scioli, tanto éste desde la Presidencia como Gustavo Bordet desde la gobernación concentrarán sus agendas políticas en aquellos gobiernos afines que ganaron cada uno en su territorio. No es este, precisamente, el caso de Gualeguay.
Más grave será la situación si gana Scioli y a Luis Erro, tal cual él mismo aseguró, le dan un cargo de importancia en alguna cartera provincial o nacional como devolución de gentilezas.
Por lo tanto, si gana Scioli, a Bogdan y su gente no les será fácil gobernar, menos promover el cambio, ya que no contarán con la simpatía necesaria en términos de recursos y soportes, mientras que, en el hipotético caso de ganar Erro, se agravaría la situación.
Tal es así que, si gana Scioli, se esfumará el sueño de gobernar un período de progreso y desarrollo, se dilapidará esa oportunidad de cambiar, de mejorar.
En rigor de verdad, y lejos de pretender infundir miedos, sino pretendiendo ayudar a pensar, si gana Scioli, Gualeguay difícilmente pueda ver cristalizado el cambio y concretados sus sueños de tener un parque industrial, cloacas, camino a Puerto Ruiz, un hospital que funcione, una educación moderna y digna, una seguridad como la de antes, una niñez sin droga, etcétera, etcétera.
En definitiva, si gana Scioli, seguiremos como estábamos, habrá sido inútil haber querido cambiar, y, nuevamente, tal como siempre ocurrió, Gualeguay seguirá postergado, por lo menos, por cuatro años más.
Así es que, si algún gualeyo quiere un gobierno local que pueda gobernar para un cambio, no solo deberá votarlo a Macri, sino que deberá asegurarse de que sus vecinos gualeyos también lo hagan. Si no lo hace, que Dios y la Patria se lo demanden.
Norman Robson para Gualeguay21